Estudio de la LSE muestra fuerte aumento de la maternidad adolescente durante la guerra de Irak
La guerra de Irak que duro nueve años dio lugar a un fuerte aumento de la maternidad adolescente, según un nuevo estudio publicado el 12 de diciembre por la Escuela de Economía y Ciencia Política de Londres.
Un estudio realizado por la LSE, Valeria Cetorelli candidata a doctorado en demografía, muestra que la fecundidad adolescente en Irak aumentó en más del 30% entre 2003 y 2010 debido al aumento de los matrimonios precoces entre las niñas con menor nivel educativo.
La estudiante de doctorado analizó datos retrospectivos del historial de nacimientos a partir de 2 encuestas de indicadores múltiples en Irak. Los resultados publicados en la edición de diciembre 2014 de Población y Desarrollo dan la opinión, representan el primer relato detallado de las tendencias recientes de fecundidad en Irak.
Ella encontró que de 1997 a 2003 la fecundidad adolescente en Irak era estable ó justo por debajo de 70 nacimientos por cada 1.000 niñas de 15-19 años. Sin embargo poco después del comienzo de la guerra, la fecundidad adolescente aumentó considerablemente, llegando a más de 95 nacimientos por cada 1.000 niñas en 2010.
«Durante la guerra, las mujeres se han estado casando a edades muy tempranas, posiblemente a causa de la inseguridad post-2003», dijo Cetorelli.
«Los peligros reales y percibidos de acoso y daño físico, combinado con el resurgimiento de las fuerzas conservadoras sectarias, tribales y otros, impidieron que muchas mujeres disfrutaran de una vida pública o siquiera salir de sus casas sin un acompañante masculino.»
Cetorelli dijo que muchas niñas pueden haber sido forzada a casarse a una corta edad por la falta de alternativas. Las familias pueden haber considerado el matrimonio precoz la mejor manera de proteger a sus hijas y el honor de la familia.
«Esta tendencia es preocupante porque las adolescentes casadas tienen menor nivel económico en el hogar y pueden estar en mayor riesgo de violencia doméstica. La maternidad adolescente también está vinculada a un mayor riesgo de muertes maternas y peores resultados de salud para los niños.»
El estudio de Cetorelli muestra estos efectos negativos que pueden ser magnificados por el hecho de que los matrimonios precoces ocurren principalmente entre las niñas sin educación o sólo con la educación primaria. Las mujeres iraquíes con educación secundaria o superior son mucho menos propensos a contraer matrimonio a una edad temprana.
«Estos resultados tienen implicaciones para los responsables políticos y organizaciones de la sociedad civil. Se necesitan más estrategias para ampliar el acceso de las niñas a la educación secundaria y restaurar un sentido general de la seguridad en su vida cotidiana», agregó Cetorelli.
Fuente: www.medicalnewstoday.com