Aunque no existe una edad límite legal, los especialistas aconsejan no someterse a este tipo de técnicas a mujeres de más de 50 años.
Problemas psicológicos
Alrededor del 40 % de las parejas que se someten a tratamientos de fertilidad consiguen el embarazo. Sin embargo, el camino es a veces demasiado largo y los conflictos psicológicos pueden llegar a cambiar la vida de las parejas que pasan por eso.
Según la doctora en Psicología Clínica del servicio de Medicina Psicosomática del Instituto Dexeus de Barcelona, Diana Guerra, «Entre un 25 % y un 60 % de esas personas pueden desarrollar un síntoma psicopatológico. La ansiedad, la presión social, el miedo ante las pruebas o los tiempos de espera pueden provocar un impacto emocional ante el cual es necesario estar preparado.»
Los días de espera desde el inicio del tratamiento hasta el momento de conocer el resultado son los más duros. El comienzo de la menstruación es la prueba de que el método ha fallado, y eso genera muchos síntomas depresivos.
Por otra parte, todo lo relacionado con niños, como bautizos, comuniones, cumpleaños de los hijos de amigos o familiares, se convierten en situaciones indeseadas. Lo mismo ocurre con las conversaciones sobre embarazos o niños o el encuentro con mujeres embarazadas.
Según la doctora Diana Guerra, la mayoría de las parejas que se someten a tratamientos de fertilidad presentan algún trastorno con síntomas de ansiedad o depresión. Los especialistas consideran que las parejas con problemas de esterilidad deben recibir apoyo psicológico que les ayude a desmitificar falsas ideas, acabar con el sentimiento de culpa y desbloquear las frustraciones, lo que favorecerá el éxito del tratamiento.
El principal trastorno para la salud tras un tratamiento de fertilidad es el peligro de embarazo múltiple. La tasa de embarazo múltiple aumenta un 12 % tras los tratamientos.
Efectos secundarios
El principal trastorno para la salud tras un tratamiento de fertilidad es el peligro de embarazo múltiple. La tasa de embarazo múltiple aumenta un 12 % tras los tratamientos.
Sus riesgos asociados con el embarazo múltiple son hipertensión, excesiva acumulación de líquido amniótico, abortos, parto prematuro (con aumento de la mortalidad perinatal y niños de bajo peso e inmaduros).
El síndrome de hiperestimulación ovárica es otro de los riesgos asociados a los tratamientos de fertilidad. Aparece cuando los ovarios han sido sobreestimulados.
Normalmente se da después de la administración de hormonas. Existen tres grados: ligera, moderada y severa, y provoca sensación de pesadez, náuseas, dolores abdominales…
Se ha especulado mucho sobre la salud de los niños nacidos por reproducción in vitro. Sin embargo, un estudio realizado en la Clínica de la Zarzuela de Madrid y publicado recientemente confirma que estos niños crecen totalmente sanos y normales. Al ser niños tan deseados, su entorno familiar es más estable, las relaciones filiales son muy fuertes y hay grandes vínculos de amor y cariño.
Listas de espera para ser mamás
Las listas de espera y la escasez de centros públicos especializados provocan que la mayoría opte por la sanidad privada. Los pacientes reclaman que, al menos, la medicación la costee la Seguridad Social, como ocurre ya en Catalunya.
Según María Miramón, de la Asociación para Problemas de Infertilidad, «casi todos empezamos por la Seguridad Social, pero puedes pasar cuatro años esperando la primera visita y otros dos de pruebas. Si el tratamiento fracasa, no te lo repiten hasta el siguiente año; un problema para las que tienen más de 30 años, pues a partir de los 38 no puedes hacerlo».
Según el doctor José Remohí, se están desarrollando numerosas investigaciones para simplificar la estimulación ovárica y sus posibles riesgos. En un futuro no muy lejano, la estimulación ovárica será menos costosa, menos duradera y también menos arriesgada. Además, se eliminará el riesgo de embarazo múltiple con la introducción de nuevas técnicas de cultivo embrionario.
Por último, gracias a los nuevos métodos de detección de anomalías embrionarias, se evitará el riesgo de transmisión de enfermedades genéticas.
Publicado en Terra