Durante la fertilización in vitro las contracciones uterinas pueden reducir las probabilidades de quedar embarazada, pero según un nuevo estudio publicado en la revista Fertility and Sterility esto sería contrario en procedimientos como la inseminación artificial.
El investigador principal Manuel Fernández y su equipo del Instituto Valenciano de Infertilidad en España, encontró que las contracciones uterinas aumentan en mujeres durante la inseminación artificial, y lo más probable es que el procedimiento sea exitoso.
La inseminación artificial también conocida como la inseminación intrauterina (IIU), consiste en insertar directamente el esperma en el útero de una mujer durante la ovulación. El objetivo de este procedimiento es aumentar las probabilidades de fertilización mediante el aumento del número de espermatozoides que llegan a las trompas de Falopio.
El IIU es una de las formas más sencilla y económica de los tratamientos de fertilidad, es por eso que el procedimiento es más utilizado. Sin embargo el equipo de investigación muestra que la tasa de éxito de la IIU es inferior a un tratamiento de fertilidad más complejo y como tal el procedimiento se ha quedado en términos de desarrollo en los últimos años
En su estudio Fernández y su equipo se pusieron a buscar los factores que pueden mejorar el éxito de la IIU.
Los investigadores analizaron los datos de 610 mujeres que se sometieron a la IIU, ya sea con el esperma de su pareja o el esperma de un donante entre 2005 y 2010.
Los resultados del análisis revelan que el número de contracciones uterinas que una mujer efectúa cada minuto durante la inseminación artificial está positivamente relacionada con el número de nacidos con vida. «Cuando el número de contracciones es alta, las tasas de embarazo y nacidos vivos son también notablemente elevados», explica Fernández.
El equipo también encontró que el momento de la inseminación parecía ser una influencia importante en su éxito, se observó una mejora significativa cuando el procedimiento se llevó a cabo el mismo día de la ruptura folicular – la liberación de óvulos.
Otros factores que parecen afectar el éxito de la IIU – independiente de nacidos con vida – incluyen si una mujer es inseminada con el esperma de su pareja o de un donante, la edad materna y el número de folículos.
Tomando todos estos factores en cuenta, el equipo dice IIU podría ofrecer una tasa de éxito del 15-20% por ciclo con el esperma de su pareja y una tasa de éxito del 25% por ciclo con el esperma de un donante.
Fuente:www.medicalnewstoday.com