Egipto: Revolución y fecundación in vitro

Foto: Oxfam Flickr

Rachel Williamson

Lunes 07/10/2013

La joven pareja que llegó a la Clínica de Fertilidad del médico Bassem Elhelw sabía exactamente qué quería: tener un hijo varón a través de fecundación in vitro (FIV).

Después de apenas cuatro meses de matrimonio, ya tenían bastante experiencia en esto. Habían hablado con otros dos médicos expertos en fertilización, y la joven mujer había sido sometida ya a dos inducciones de ovulación.

Elhelw señaló que, si les hubiera aconsejado tener paciencia y probar procedimientos menos invasivos antes de optar por la FIV, la pareja habría acudido a un cuarto médico.

Las técnicas de reproducción asistida (TRA) están en auge en Egipto. Según especialistas como Elhelw, este se convirtió en un campo fructífero para médicos que quieren hacer mucho dinero. Los tratamientos de FIV aumentaron significativamente desde la revolución de enero de 2011.

Con el derrocamiento de Hosni Mubarak (1981-2011) se terminaron muchas restricciones para la publicidad en televisión, y por ello clínicas de FIV en El Cairo y en la norteña ciudad de Alejandría pueden promocionar mejor sus servicios.

Elhelw dijo que ahora los infomerciales (comerciales televisivos de larga duración) se pueden ver en provincias rurales antes aisladas, y ello ha generado expectativas desmesuradas sobre lo que las TRA pueden lograr.

Además de esos cambios específicos, trabajadores de la salud consideran que la revolución de 2011 y la inestabilidad creada desde entonces también generaron una nueva dinámica.

«Creo que lo que cambió ahora es la actitud hacia la infertilidad», dijo Elhelw a IPS. «Las actitudes cambiaron porque en los últimos dos años las cosas pasaron muy rápidamente. El ritmo de vida en El Cairo solía ser muy lento».

La cuenta espermática de los egipcios es baja, como documentó la investigadora Marcia Inhorn, de la Universidad de Yale, en su estudio de 2004 titulado Middle Eastern Masculinities in the Age of New Reproductive Technologies: Male Infertility and Stigma in Egypt and Lebanon (Las masculinidades de Medio Oriente en la era de las nuevas tecnologías reproductivas: La infertilidad masculina y el estigma en Egipto y Líbano). Además, la prevalencia del síndrome de ovario poliquístico entre las mujeres de Medio Oriente es superior al promedio, y la obesidad tiene una gran incidencia en la infertilidad de las egipcias, dijo Inhorn .

Esos problemas se exacerbaron desde la revolución, según personal médico.

El desempleo y las tensiones sociales generaron un rápido cambio en las costumbres. Los hombres y las mujeres jóvenes pasan hoy más tiempo en cafés fumando shisha (o narguile, pipa oriental), encerrándose largas horas en ambientes llenos de humo. El tabaco es una conocida causa de infertilidad.

«El tabaco es hematotóxico. No es bueno para la calidad del esperma», explicó Inhorn, y añadió que al menos 50 % de los hombres en Medio Oriente fuman.

Ashraf Sabry, director de tres clínicas de fertilidad epónimas en El Cairo, dijo que entre 60 y 70 % de los casos que atendía eran de hombres infértiles. El médico atribuyó esto en parte al consumo de cigarrillos y otro tanto a que los jóvenes pasan más tiempo en cafés.

Fuente: Diario EL COMERCIO

Este contenido ha sido publicado originalmente por Diario EL COMERCIO en la siguiente dirección: http://www.elcomercio.com/columnistas/Revolucion-fecundacion-in-vitro_0_1006699350.html. Si está pensando en hacer uso del mismo, por favor, cite la fuente y haga un enlace hacia la nota original de donde usted ha tomado este contenido. ElComercio.com

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

8 + Nueve =