Ellas evitan cualquier tipo de contacto sexual y rehúyen las relaciones amorosas. Esta imposibilidad las hace sentir frustradas y humilladas. Conozca sus causas.
Cuentan que Apolo, el dios del sol y la música, fue maldecido por Eros, quien molesto cogió una flecha de hierro y le disparó a la ninfa Dafne provocando rechazo y desinterés en ella. Luego, tomó una flecha de oro y la lanzó a Apolo provocando amor y desesperación por Dafne. Cuanto más él la perseguía rogándole que se quedara a su lado, ella más huía. La ninfa terminó en las montañas, convertida en un árbol, mientras Apolo le juraba amor eterno.
Este mito simboliza el complejo de Dafne, también llamado ‘angustia a la penetración’, y consiste en el miedo de algunas jóvenes hacia la sexualidad.
Por temor, ciertas mujeres evitan cualquier tipo de contacto sexual. Rehúyen a las relaciones amorosas y prefieren perjudicarse ellas mismas aislándose con tal de no enfrentar la situación de miedo.
Esto puede provocar un espasmo involuntario de músculos que rodean la entrada de la vagina, a tal punto que es imposible el acto sexual, lo que ocasiona a veces mucho dolor y puede que la mujer se sienta aterrorizada, humillada y frustrada por los intentos fallidos.
CONOZCA LAS CAUSAS
El complejo de Dafne se presenta generalmente en mujeres jóvenes. Pero no es excluyente de mujeres de edad más avanzada.
Entre las causas principales figuran la falta de una adecuada educación sexual, una educación religiosa muy estricta, efectos psicológicos producto de un abuso o violación, creencias erróneas con respecto a la sexualidad, crecer con padres que tienen actitudes de rigidez y represión.
Para revertir esta situación, los especialistas aconsejan que lo principal es tomar conciencia de que el problema tiene solución. Luego hay que eliminar creencias erróneas respecto de la sexualidad y tomar una actitud activa en la resolución del problema.
Asimismo, aprender a poner límites a situaciones desagradables, en vez de que sea el cuerpo quien lo haga. Pedir lo que se necesita, en lugar de tomar una actitud evitativa.
Por último, es importante que la mujer víctima de este complejo tome una actitud activa en la resolución del problema. No hay soluciones mágicas, se requiere de mucho compromiso y ganas de resolverlo.
APOYO DE LA PAREJA
La pareja puede ayudar a confrontar esta situación con paciencia y mucha tolerancia, sin apresurarse. Ir muy despacio a medida que vaya adquiriendo mayor confianza, brindándole seguridad de que no se hará nada que ella no quiera.
Dar confianza y decirle que no va a ser abandonada por esta causa. Apuntar siempre a la comunicación. En síntesis, mostrar amor y comprensión, aconsejan los expertos.
CLAVES
El temor a las relaciones sexuales provoca ansiedad, tensión, rabia en las mujeres que lo padecen.
Sienten mucha persecución interna y externa y encuentran que el único lugar de alivio es el alejamiento de la situación temida.
Fuente: La República