En estas fechas es tradicional en México escribir calaveritas: poemas jocosos sobre la muerte dedicados a personas queridas. Aquí nuestra contribución a esta notable tradición, dedicada, con cariño, al Centro de Fertilidad Humana en México
Andaba la parca rondando
el centro de fertilidad
pensando en robarse un niño
pa llevárselo a Mictlán
Y mientras rondaba el centro
La flaca se emocionaba
viendo a tanta genetista
tan guapa y tan ocupada
El doctor Góngora la vio
pensativa en una sala
¿qué le ocurre, mi estimada?
Sin dudarlo preguntó
La muerte quería un niño
O al doctor, una de dos.
“Un niño será más fácil”
Es lo que pensó el doctor.
Así que el equipo entero
Pasó la noche chambeando
Y con una FIV bien hecha
A la flaca embarazaron.
El trabajo fue excelente,
¡La parca estaba encantada!
Y a todo el laboratorio
Así los felicitaba:
“Por ser tan profesionales
Esta noche la libraron:
Ahí les dejo a su doctor…
¡Pero vuelvo al otro año!”